REALMENTE AMOR: un mix de relaciones amorosas sin límites

Varias historias, diferentes edades, un mismo propósito: mostrar las distintas relaciones de amor que existen en la cotidianidad. Ello adquiere un toque especial al situar la narrativa en las vísperas de Navidad. Realmente Amor ha sido elegida por los seguidores de Montaje Crítico como la segunda película de amor favorita. Un filme que entretiene y permite pasar el rato con amigos o familiares, gracias al predominio de las características de su género. Una verdadera comedia romántica.

A diferencia de The Notebook (elegida como la película de amor favorita) donde el drama es el hilo conductor de una historia de una pareja; Realmente Amor transciende la relación pasional entre dos personas para mostrar el amor en sus diferentes manifestaciones. Tal propósito se lleva a cabo a través de distintas historias.

La película se ubica en la ciudad inglesa de Londres, en vísperas de la celebración de Navidad. Distintos personajes atraviesan diferentes situaciones que los llevan a emprender nuevamente sus vidas amorosas. Desde la relación entre un primer ministro poco convencional y su secretaria malhablada; pasando por un escritor víctima de la infidelidad, con una muchacha con quien sólo se entiende por gestos; a un matrimonio de años en una situación crítica; la historia ofrece pequeños conflictos enlazados que buscan su resolución. Además, acompañan la trama un músico que pretende reaparecer en el mercado, un niño que quiere manifestar su amor, una novia confusa frente al amigo de su novio, una mujer enamorada de su compañero de trabajo, y una pareja de actores porno amateurs.

Fiel al género de la comedia romántica, Realmente amor complementa el romanticismo con escenas de humor que relajan la trama en las situaciones quizás más dramáticas (como el discurso de Liam Neeson en el velatorio de su esposa). El baile de Hugh Grant y la declaración de amor de un chico a un padre preocupado, son algunas de las escenas que brindan diversión al espectador y lo mantienen atento a un filme que se disfruta.

No hay que dejar de destacar ciertas escenas con un toque más al estilo dramático, que fueron igualmente resueltas dentro del género de la comedia romántica. Por ejemplo, las situaciones de descubrimiento de una efectiva o posible infidelidad, o los encuentros de una hermana preocupada por y totalmente dedicada a su hermano enfermo. 

La narrativa es lineal y no presenta mayores complicaciones. Quizás en algún punto "algo previsible", pero cumple con las exigencias de quien desea ver una historia de amor sin mayor drama. En este caso, la pluralidad de personajes es un plus en la película ya que permite un entrecruzado constante entre las historias que mantienen en vilo al espectador. 

Existen otras películas en las que la diversidad de personajes es el elemento característico de la trama, con la particularidad de que el espectador va descubriendo el nexo entre ellos a lo largo del desarrollo de la historia, como es el caso de Jugando con el corazón. A diferencia de esas películas, Realmente Amor no mantiene en suspenso al espectador sino que revela desde un principio el vínculo entre las historias.

Las representaciones del elenco son impecables. Desde los actores y actrices de mayor renombre a otros no tan populares, todos responden a las exigencias del guión a la perfección. Para aquellos que además disfrutan del idioma original de la película, el inglés británico es un ingrediente adicional de un filme situado en la capital inglesa.

Respecto de la belleza paisajista de Londres, se destaca un aspecto negativo desde el trabajo de dirección: la escasez de paisajes de exteriores. Se recurrió a un uso predominante de locaciones interiores que se acompañaron con planos, en su mayoría, cerrados; desaprovechando una ciudad tan encantadora visualmente como Londres. Sólo se observan importantes vistas en la visita de Colin Firth al sur de Francia, donde la tranquilidad de la naturaleza acompaña el sentimiento de soledad y reflexión que necesitaba el protagonista para escribir. 

La falta de paisajes se ve complementado en un sentido positivo, por otro factor indispensable que hace a un filme: la banda sonora. La película no sólo se disfruta por su historia, su humor, su romanticismo sino también por los excelentes clásicos de la música del ´60 y del ´70, que acompañan cada uno de los recorridos de los personajes en su búsqueda por pasar una Navidad enamorados.

"All you need is love"; de The Beatles, "Bye, bye, babe", de Bay City; "Sweetest Goodbye", de Maroon 5; "God only knows", de The Beach Boys; y el oportuno "All I want for Christmas is you", de Olivia Olson; son sólo algunos de los ritmos que acompañan los oídos de los espectadores en los 128 minutos de proyección.

Con diferentes elementos, el primer trabajo de dirección del más conocido guionista, Richard Curtis (encargado del guión de la película actualmente nominada al Oscar, Caballo de guerra) logra diferenciarse y distinguirse de las clásicas películas de su género. La intención de mostrar el amor en todas sus expresiones permite que incluso el espectador soltero y/o en una dramática situación de pareja pueda sentirse identificado por el amor a un hermano, a un padre o a un amigo. 

¿Qué te pareció Realmente Amor? Les dejo un lindo montaje de escenas de la película con una versión de Lynden David Hall  del clásico de The Beatles, "All you need is Love": http://www.youtube.com/watch?v=BKGAdE6wwTM Disfrútenlo!!

Conocé la galería de imágenes de la película en nuestra página de Facebook: http://on.fb.me/15YgIVC